Y el sábado, 25 de julio, el Heraldo de Castellón llegaba a tiempo para incluir a última hora de su edición vespertina ( lo que nos hace preguntarnos acerca de la hora en la que salía a la calle ) una breve noticia sobre la partida de las milicias populares de Castellón, con el capitán Sirera al mando, que habían dejado la ciudad con dirección a Sagunto sobre las 20 horas.
No será hasta dos días después cuando el diario, que no salía los domingos, publique una noticia más desarrollada sobre la partida y posteriores avances de estas milicias.